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lunes, 11 de octubre de 2010

 
Estilo Barroco

A continuacion se presenta una investigacion realizada, tomando en cuenta los siguientes puntos

Contexto social de la épocaàMedievo (600a.c.-1800d.c.)
·         Estilo barroco (1600 hasta el año 1750)

Relación con los estilos de arte que se desarrollaron en ese periodo
  1. ·         Romano
  2. ·         Bizantino
  3. ·         Gótico
  4. ·         Renacimiento 
  5. ·         Rococó
  6. ·         Paleocristiano

Estudio de un estilo por sus características
·         Estilo barroco


 
Contexto social del Medievo
La Edad Media, Medievo o Medioevo es el período histórico de la civilización occidental comprendido entre el siglo V y el XV. Su comienzo se sitúa convencionalmente en el año 476 con la caída del Imperio Romano de Occidente y su fin en 1492 con el descubrimiento de América,1 o en 1453 con la caída del Imperio Bizantino, fecha que tiene la ventaja de coincidir con la invención de la imprenta (Biblia de Gutenberg) y con el fin de la Guerra de los Cien Años.
El estilo Barroco es un movimiento cultural e ideológico que se desarrolla en España y Europa desde finales del siglo XVI hasta comienzos del XVIII.
El barroco se dio con más intensidad y duración en España debido a la fuerza de la Iglesia Católica y de la
Inquisición. El siglo XVII es, en general, una época de crisis y decadencia.

La decadencia política y militar
El siglo XVII fue para España un período de grave crisis política, militar, económica y social que terminó por convertir el Imperio Español en una potencia de segundo rango dentro de Europa. Los llamados Austrias menores -Felipe III, Felipe IV y Carlos II- dejaron el gobierno de la nación en manos de ministros de confianza o validos entre los que destacaron el duque de Lerma y el conde-duque de Olivares.
En política exterior, el duque de Lerma, valido de Felipe III, adoptó una política pacifista y logró acabar con todos los conflictos heredados del reinado de Felipe II. Por el contrario, el conde-duque de Olivares, valido de Felipe VI, involucró de lleno a España en la guerra de los Treinta Años, en la que España sufrió graves derrotas militares.
Durante la segunda mitad del siglo, Francia aprovechó la debilidad militar española y ejerció una continua presión expansionista sobre los territorios europeos regidos por Carlos II. Como consecuencia de esta presión, la Corona española perdió buena parte de sus posesiones en Europa, de modo que a principios del siglo XVIII el Imperio español en Europa estaba totalmente liquidado.
En política interior, la crisis no fue menos importante. El duque de Lerma procedió a la expulsión de los moriscos (1609), con lo que se arruinaron las tierras de regadío del litoral levantino, y permitió la generalización de la corrupción administrativa. Posteriormente, la política centralista del conde-duque de Olivares provocó numerosas sublevaciones en Cataluña, Portugal, Andalucía, Nápoles y Sicilia. La rebelión catalana fue sofocada el año 1652, mientras que la sublevación portuguesa desembocó en la independencia de ese país (1668).

La crisis social y económica
En el siglo XVII, España sufrió una grave crisis demográfica, consecuencia de la expulsión de casi 300.000 moriscos y de la mortalidad provocada por las continuas guerras, el hambre y la peste.
La sociedad española del siglo XVII era una sociedad escindida: la nobleza y el clero conservaron tierras y privilegios, mientras que los campesinos sufrieron en todo su rigor la crisis económica. La miseria en el campo arrastró a muchos campesinos hacia las ciudades, donde esperaban mejorar su calidad de vida; pero en las ciudades se vieron abarcados al ejercicio de la mendicidad cuando no directamente a la delincuencia.
Por otra parte, la jerarquización y el conservadurismo social dificultaban el paso de un estamento a otro y sólo algunos burgueses lograron acceder a la nobleza. La única posibilidad que se ofrecía al estado llano para obtener los beneficios que la sociedad estamental concedía a los estamentos privilegiados era pasar a engrosar las filas del clero. Este hecho, unido al clima de fervor religioso, trajo como consecuencia que durante el siglo XVII se duplicara el número de eclesiásticos en España

Relación con los estilos de arte

1.    Romano
El arte románico es toda aquella producción artística generada en los países de Europa Occidental durante los siglos XI y XII. Se trata de un arte lleno de espiritualidad, fruto de la combinación armónica de diversas influencias como la romana, prerrománica, bizantina, germánica, árabe, etc.
Los diferentes estilos fueron evolucionando hacia uno sólo, muy homogéneo, con características casi idénticas en todos los países.  Dos hechos de importancia social y religiosa fueron relevantes para el desarrollo de este arte: Por un lado, nos encontramos con el fenómeno popular que se extendió en la época de las largas peregrinaciones a Santiago de Compostela, Roma y Jerusalén.  Por otro, la influencia de las órdenes religiosas a través de las nuevas reformas. La primera que se llevó a cabo fue la del monasterio benedictino de Cluny, en Francia, expandiéndose por Europa.

2.    Bizantino
El arte bizantino constituye uno de los episodios más grandiosos del arte universal. Se fundamenta en el arte griego y paleocristiano, con grandes influencias orientales (persa y musulmana).
El arte bizantino se va a dividir en tres grandes etapas:
Arte protobizantino: 527 - 726, año en el que aparece la querella iconoclasta. La época dorada de este arte coincide con la época de Justiniano.
La querella iconoclasta se prolongó entre los años 726 - 843 y enfrentó a los iconoclastas contra los iconódulos y fue tan violenta que produjo una crisis artística acentuadísima, especialmente en el arte figurativo.
Primera Edad de Oro Bizantina: 913 - 1204, momento en que los cruzados destruyen Constantinopla.
Segunda Edad de Oro Bizantina: 1261 - 1453, cuando los turcos toman Constantinopla.

3.    Gótico
El arte gótico se corresponde con la Baja Edad Media, a continuación del románico. Es un período dinámico desde el punto de vista socioeconómico, muy variado, con intensos contactos con Oriente a través de las cruzadas y las rutas comerciales.  Se trata de un estilo artístico europeo con unos límites cronológicos que oscilan aproximadamente entre el año 1140 y las últimas décadas del siglo XVI, dependiendo del área geográfica.  Hoy día se considera uno de los momentos más importantes desde el punto de vista artístico en Europa. Fue un arte que se aplicó en el campo de la arquitectura civil y religiosa, la escultura, las vidrieras, la pintura mural y sobre tabla, los manuscritos miniados y las diversas artes decorativas. El término gótico fue empleado por primera vez por los adinerados del renacimiento, en sentido peyorativo, para referirse al arte de la edad media, al que ellos consideraban inferior y bárbaro (gótico deriva de godo) comparado con el arte clásico.

4.    Renacimiento
El Renacimiento expresa un movimiento y una época donde se retorna al estudio e imitación de la literatura, arte y filosofía de la antigüedad clásica griega y romana En pintura la renovación hacia lo clásico se realiza por medio del estudio del natural y de la aplicación de las leyes de la perspectiva, únicamente este arte recibe la influencia greco-romana a través de la arquitectura y la escultura.

5.    Rococó
Los temas de la pintura rococó tienden a la superficialidad, los colores a la alegría y la luz se insinúa donde puede. Los personajes, reales o imaginarios son idealizados.   Dado que el estilo nació en Francia, ahí es donde se encuentran los artistas más representativos, pero también hay pintura rococó de interés en  Italia y en  Inglaterra.     



Los temas preferidos para la representación en pintura son: fiestas galantes y campestres, damas, rigodones, minués y aventuras amorosas y cortesanas. Por todo esto, se recuperan personajes mitológicos como Venus y Amor que se entremezclan en las escenas representadas dotando a las composiciones de un tono de sensualidad, alegría y frescura.
Es usual el referirse al estilo Rococó como estilo galante. El nombre proviene del verbo galer, que en francés significa ser valiente y hábil en el trato con las mujeres. El galante es aquel que sabe tratar y complacer a una mujer. La figura de la mujer es un foco inspirador de la pintura. La mujer es un figura bella y sensual, cada vez más culta. Ella seduce y participa en aventuras prohibidas.

6.    Paleocristiano
Es el nexo de unión entre dos grandes etapas de la cultura y el arte occidental. Nos referimos a la Antigüedad Clásica y a la Edad Media Cristiana.
El arte paleocristiano se puede dividir en dos grandes periodos:
Periodo de persecución y clandestinidad (siglos II y III),
Periodo del gran arte paleocristiano en tiempos del Cristianismo como religión oficial del Imperio (parte del siglo IV). En esta fase será, por contra, un arte protegido e impulsado por las grandes jerarquías eclesiásticas de la época.

Arte barroco
Es un estilo artístico, dramático, que se utilizó en arquitectura, pintura y escultura, y que intentaba despertar las emociones del espectador.  Los artistas y arquitectos que incursionaron en este estilo, utilizaron todo tipo de trucos para crear una ilusión visual de formas y movimientos. Este estilo floreció desde 1600 hasta 1740.   El término Barroco se creó en el siglo XIX y deriva del vocablo berueco que significa "perla irregular". El Barroco al principio se tuvo como una etapa del arte puente entre el Renacimiento y el Neoclasicismo. Sin embargo, es mucho más que eso. El arte barroco, a diferencia del arte clásico en que primaba la razón, es un arte en que se exacerban los sentidos y la sensibilidad se pone al límite. Estos rasgos se continúan en el Rococó y se desbordan en el Romanticismo. Ya en el siglo XX, el Dadaísmo y la Abstracción corroboran el triunfo del sentimiento en detrimento de la razón de un modo definitivo.

Barroco en España
El siglo XVIII es el siglo del barroco, en que España esta viviendo las últimas consecuencias del concilio de Trento. En España es un barroco que todavía no es muy recargado, porque está viviendo todavía las influencias de Herrera. La pintura barroca española es esencialmente religiosa, aunque también hay otros temas.
Se va a representar a las clases bajas.
De Rivera tenemos la "Inmaculada Concepción"; obras con santos y mártires, como es el "Martirio de San Bartolomé"; también tiene temas mitológicos y del mundo antiguo como "Arquímedes"; del antiguo testamento, "El sueño de Jacob".
De la escuela Andaluza son Zurbarán, Murillo y Valdés Leal. Estos tres pintores representan un aspecto de la religión.
Murillo representa el aspecto amable de la religión, por eso suele representar inmaculadas y niños; de él tenemos la "Inmaculada Concepción", "El buen pastor", "Los niños de la Concha"; pero tiene otro lado suyo que representa la crisis de Sevilla y representa una serie de cuadros, así tenemos "Los niños comiendo melón", "Los niños de la concha", "El niño pordiosero".
Velázquez es sevillano de madre portuguesa y su pintura se caracteriza por su realismo, es tenebrista pero realiza dos viajes a Italia, él lucha por la luz, el color y llega a dominar la perspectiva aérea.
Además, Velázquez pasó a ser pintor de corte.

Barroco en Holanda

Al comenzar el siglo XVII muchos artistas holandeses, incluido Hendrick Goltzius, todavía pintaban al estilo manierista. El barroco de Caravaggio llegó a Holanda cuando determinados artistas, entre los que sobresalen Gerrit van Honthorst y Hendrik Terbrugghen, retornaron a su país natal procedentes de Italia; hacia 1620 el naturalismo estaba fuertemente asentado en la escuela de Utrecht. Diferente al resto de artistas holandeses,  Rembrandt, el maestro más grande del barroco holandés, pintó una gran variedad de temas: -retratos, paisajes y escenas históricas, mitológicas y religiosas- con incomparable virtuosismo.   Paisajes,  bodegones,  cuadros de animales y perspectivas arquitectónicas se convirtieron a partir de su obra en importantes géneros de la pintura holandesa.


Barroco en Inglaterra:

La pintura barroca en Inglaterra estuvo dominada por la presencia de Van Dyck, inspirador de una generación entera de retratistas. La escultura recibió influencias, igualmente, de los estilos italiano y flamenco. Sir Christopher Wren también viajó a Italia y Francia, y sus proyectos para la catedral de Saint Paul en Londres (iniciada en 1675) revelan su profundo conocimiento de Bramante, Bernini y otros arquitectos italianos. El manierismo también se conservó en las pinturas de Jacques Callot y Jacques Bellange. El naturalismo barroco evolucionó de la mano de artistas como Valentin de Boulogne, que había vivido en Italia, y de aquellos otros que habían tenido relación con los pintores flamencos naturalistas, como los hermanos Le Nain y Philippe de Champaigne. De enorme transcendencia en la historia de la pintura barroca francesa fue el clasicismo de Nicolas Poussin. Aunque vivió en Roma la mayor parte de su vida, la influencia de Poussin -como la de su compatriota en la capital italiana Claudio de Lorena- en su país natal fue enorme. La segunda mitad del siglo XVII abrió paso a un arte plenamente barroco, donde se combinaba el clasicismo precedente con los nuevos gustos dictados por la Academia de Bellas Artes, ejemplificado en los frescos de Charles Lebrun para el palacio de Versalles. El último exponente de la pintura barroca francesa fue Antoine Coypel, fuertemente influido por la obra de Rubens, como se aprecia en las pinturas para la capilla real de Versalles.  La escultura de Pierre Puget también fue característica del pleno barroco, mientras que François Girardon y Antoine Coysevox practicaron un marcado clasicismo en las esculturas monumentales para el rey Luis XIV. El palacio de Versalles (comenzado en 1661), construido para albergar la corte de Luis XIV por Louis Le Vau, André Le Nôtre y Charles Lebrun, es el monumento arquitectónico más importante del barroco francés.


Barroco en Austria y Alemania:

Aunque los acontecimientos políticos -guerra de los Treinta Años (1618-1648) en Alemania y presencia de los turcos en Austria- impidieron el desarrollo del barroco en ambos países hasta el siglo XVIII, algunos artistas importantes se destacaron a lo largo del siglo XVII. Balthasar Permoser, en Baviera, asimiló el estilo del pleno barroco italiano trasladándolo a Dresde, donde se convirtió en el escultor barroco más destacado. Uno de los más destacados arquitectos barrocos de Austria, Johann Bernhard Fischer von Erlach, demostró su perfecto conocimiento de los modelos italianos en la exuberante iglesia de San Carlos Borromeo en Viena (1716-1737).


El arte barroco engloba numerosas particularidades regionales. Arte barroco en Italia   En Italia, la pintura, escultura y arquitectura barrocas evolucionaron a partir del manierismo.


La Pintura Del Barroco En Italia.

A finales del siglo XVI la pintura barroca se inicia bajo la influencia del Caravaggio.  El nuevo estilo favorece los temas religiosos y arrincona la mitología a los palacios, combina realismo e ilusión, descuida el dibujo y usa profusamente los tonos dorados. El claroscuro se vuelve más dramático y la perspectiva adquiere importancia. La  composición sigue líneas onduladas, circulares o quebradas.  Caravaggio y  Tiépolo, desde luego, no son los únicos pintores del Barroco italiano


Características del arte barroco
Algunas características del estilo barroco son:
Patetismo: gusta de la expresión de estados anímicos emotivos tales como: éxtasis, miedo, ansiedad, etc., que los rostros traducen con el más vivo verismo. Claroscuro: se buscan efectos propios de la pintura Se evitan las formas planas, tendiéndose a las curvas, de manera que los cuerpos se perciben como envueltos en una atmósfera luminosa y  tener profundidad. Teatralidad: existe una propensión a lo exagerado y a las actitudes elocuentes que hacen de ella una representación dramática. Los edificios aparecen llenos de movimiento.  Las fachadas planas se combinan con las curvas e incluso a veces aparecen como mixtilíneas, las fachadas curvas mezclan asimismo las formas cóncavas con las convexas. Se utilizan atlantes, cariátides, grandes columnas y pilastras, soportando cubiertas generalmente abovedadas,  abundan las cúpulas que asombran por sus dimensiones. Su grandeza aumenta al pintarse en ellas composiciones celestes. Aparece la columna salomónica, girando en un movimiento frenético esto además se intensifica con la construcción de profundos nichos y salientes cornisas, la decoración se hace muy abundante, tanto de tipo vegetal como geométrico, destacando las “placas recortadas”, pegadas a la pared y recordando a la decoración colgante,  llega incluso a tapar los elementos constructivos y a veces estos mismos se convierten en decorativo. Se huye de la fisión frontal de los edificios ya que estos con sus torres, sus cuerpos escalonados, sus columnas, se contemplan mejor con una visión lateral.
Entre otras características generales del arte barroco están su sentido del movimiento, la energía y la tensión. Fuertes contrastes de luces y sombras realzan los efectos escenográficos de muchos cuadros, esculturas y obras arquitectónicas. Una intensa espiritualidad aparece con frecuencia en las escenas de éxtasis, martirios y apariciones milagrosas. La insinuación de enormes espacios es frecuente en la pintura y escultura barrocas; tanto en el renacimiento como en el barroco, los pintores pretendieron siempre en sus obras la representación correcta del espacio y la perspectiva. El naturalismo es otra característica esencial del arte barroco; las figuras no se representan en los cuadros como simples estereotipos sino de manera individualizada, con su personalidad propia. Los artistas buscaban la representación de los sentimientos interiores, las pasiones y los temperamentos, magníficamente reflejados en los rostros de sus personajes. La intensidad e inmediatez, el individualismo y el detalle del arte barroco hicieron de él uno de los estilos más arraigados del arte occidental.
Como lo hemos mencionado anteriormente, en la mayoría de las pinturas se puede observar que el tema es religioso

bibliografia

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